martes, 14 de abril de 2015

PATO CORREDOR INDIO: Mika

De este animalito poco se ve en internet, y lo poco se repite continuamente en una página u en otra.
Es un pato que personalmente me encanta, y deseo tener descendencia de él, en ello ando, ya os contaré.




Estos días ha habido cosas en su comportamiento que me han sorprendido y me han decepcionado, pero solo llevamos cinco días juntos y tengo esperanza de que podamos colaborar juntos efectivamente en el jardín-huerto.

Mika, que así es como le hemos llamado, llegó a casa junto a una gallina sussex del mismo establecimiento que lo adquirimos.

Es súuuuuper asustadizo, y a la vez curioso. Se esconde en un rincón y estirando su largo cuello no para de observar todo lo que acontece a su alrededor. Los primeros días le estamos dando cierta distancia de espacio porque como os digo se estresa fácilmente.
Cuando le incomoda tu cercanía se pone a quejarse, si no no abre la boca. Él se expresa hablando, como nosotr@s.

Tiene  unas alas relativamente cortas a su cuerpo, cuando las abre es muy gracioso. En casa lo solté recién llegado junto a la gallina. La gente me decía que el pato lo primero que haría sería volarse al pantano ( vivimos en un pueblo con pantano que abastece de agua potable a medio Pamplona), pero para mi sorpresa fue que yo iba detrás de él tratando de pillarlo, abría las alas apurado y hablaba quejoso, pero no volaba. Sin embargo la gallina India, hubo que cortarle las alas porque se subía en el piano, en nuestros hombros, en todo lo que podía.

Es un animal patosillo, supongo que es porque tiene limitado el movimiento de las patas, que son pasos cortitos. En cuanto encuentra un estorbo que superar en su camino, echa el pecho al suelo para poder equilibrarse y solventar el obstáculo.

Cuando se relaja agita cu cola y sacude sus plumas. Le gusta mucho el agua así que de momento tiene un super barreño de la ropa lleno de agua. Le gusta meter su largo cuello para excavar con su pico el fondo del barreño en busca de algo que comer. Ello me da una idea de cómo tener que hacerle un pequeño estanque. Leí en una página inglesa de la asociación del pato corredor indio que no le gustaba el agua con profundidad, y que era mejor ponerle un plato con agua para que metiese las patitas. Al mío le encanta hundir su boca y su cabeza, sacarla del agua y agitarse para que el agua llegue a su espalda y poder refrescarse.
POLLI Y EL GALLINERO

Otra cosa curiosa de Mika es que no se separa de India, la gallina con la que vino en el viaje. Se ve que hicieron migas! Depende completamente de India. Si ella decide moverse a otro sitio él va detrás de ella. Si India se acuesta en el terreno, él también.

Me hace mucha gracia cuando India se acerca mucho a él. Le señala dándole unos pequeños "besitos" en la espalda, pero se ve que lo hace cuidadosamente para no hacerle daño, únicamente avisarla.

En cuanto su relación con Polli, mi gallina que ya estaba establecida en casa, es otro cantar. Polli es sumamente territorial, y les está complicando bastante su adaptación. Es una petarda. Pasa de ellos completamente. India trató de seguirla el primer día con la intención de estar con ella, pero Polli le comenzó a picotear y ésta desistió en su intento.

A la hora de dormir, hay dos nidos. Polli tiene clarísimo dónde duerme y no cambia su sitio por nada del mundo. Su nido tiene una ventana al lado y Polli es feliz estando en su nido y pudiendo estar a su vez asomada por la ventana a ver qué se cuece en el jardín.

Así que el primer día Polli y Mika tuvieron una enganchada pero Mika desistió rápidamente. Los siguientes días Mika huye de Polli cada vez que se acerca y no quiere entrar a dormir al gallinero. Aún entrando India a dormir él se queda fuera asustado.

Y una vez que entra al gallinero se niega a subir a la caseta donde están los nidos. Duerme solito en un rincón protegido.

Si Polli baja del nido, él sube con India.

Bueno, ya os iré contando lo que vaya descubriendo de Mika.

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